El Gobierno de Aragón y once entidades han firmado este lunes el Código Aragonés de Buenas Prácticas frente al Desperdicio Alimentario, una iniciativa pionera en el Estado español de la Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios y de Ecodes que pretende que las entidades se comprometan a trabajar para reducir el desperdicio de alimentos y, a su vez, trabajen para sensibilizar a la sociedad sobre esta problemática. La firma ha tenido lugar en el espacio Lasca Negra de Zaragoza, uno de los finalistas del II Programa de Emprendimiento Agroalimentario en Aragón.
La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, ha sido la encargada de firmar por parte del Gobierno de Aragón. Ha estado acompañada por la directora general de Protección de Consumidores y Usuarios, Ros Cihuelo. El código ha sido rubricado también por Alianza Agroalimentaria Aragonesa, Asociación de Industrias de Alimentación de Aragón, ANGED-Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución, ACES-Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados, ASUPAR-Asociación de Supermercados de Aragón, ZAMAS-Federación de Asociaciones de Detallistas de Mercados, HORECA, Federación Aragonesa de Municipios Comarcas y Provincias (FAMCP), Federación Aragonesa de Solidaridad (FAS), Consejo Aragonés de Consumidores y Usuarios y ECODES.
Broto, en su intervención, ha recordado que se calcula que en el Estado español se desperdician unas 7,7 toneladas de alimentos al año, aproximadamente un tercio de lo que se produce. Ha señalado, además, que uno de los objetivos de desarrollo sostenible es que en 2030 se haya reducido a la mitad el despilfarro alimentario. Por ello, ha insistido, son tan importantes iniciativas como el código de buenas prácticas que hoy se ha firmado.
“Toda la sociedad, todos los hogares debemos concienciarnos de que vivimos en una sociedad de despilfarro y que tenemos que acabar con esto”, ha señalado antes de destacar la importancia de la colaboración de “todos” en la lucha contra esta problemática, tanto administraciones, como entidades como las propias familias.
La consejera ha recordado que además de que “hay una parte de la población mundial que pasa hambre mientras nosotros tiramos alimentos”, esos productos que tiramos han sido cultivados, transportados y conservados por lo que han seguido un proceso que contamina el planeta. “Al comprar mucho y tirar estamos propiciando una demanda de productos mayor que la que hay en realidad”, ha puntualizado.
El director de ECODES, Víctor Viñuales, por su parte, ha insistido en que “todos debemos formar parte de la solución a este problema” y ha destacado que esta iniciativa es pionera en el Estado español. Por todo ello, ha afirmado que “es importante que la sociedad reflexione y que todas las entidades que tienen puestas en marcha buenas prácticas sensibilicen a la sociedad y las den a conocer”.
Para recoger el compromiso de todos los firmantes y ofrecer herramientas para trabajar las diferentes entidades y a las personas consumidoras se ha puesto en marcha la web: consumoresponsable.org/desperdicioalimentario.