Condenamos rotundamente el atentando ocurrido en Barcelona.
Llamamos a la convivencia, la solidaridad y la cultura de paz
Nos sumamos al comunicado de LaFede.cat
Condenamos rotundamente los atentados sufridos ayer, 17 de agosto, en las Ramblas de Barcelona y en Cambrils, en los que 16 personas fueron asesinadas y más de 80 resultaron heridas. Condenamos la generación de tanto dolor y barbarie, tal como hemos hecho en ataques similares que se han producido en distintos lugares del mundo. Ante hechos que pretenden generar terror y enfrentamientos globales, solo cabe una respuesta: la defensa de los derechos humanos, la solidaridad y la cultura de paz. Nuestro compromiso no puede ser otro.
Queremos trasladar, en primer lugar, nuestro pésame, solidaridad y apoyo a todas las víctimas, a sus familiares y amistades; a todas ellas, no importa su nacionalidad. Lo sentimos mucho. Esperamos que podamos acompañarlas de la mejor manera posible, con todos los recursos públicos y privados de la ciudad y del país. La solidaridad ciudadana inmediata, como siempre que ocurre un hecho así en cualquier lugar del mundo, ha sido la mejor de las respuestas. Esperamos que esa solidaridad y la convivencia prevalezcan.
Mostramos nuestro apoyo a quienes, siendo de diferentes orígenes y religiones, conviven con nosotros en nuestras ciudades, escuelas, calles y lugares de trabajo. Reiteramos nuestro compromiso de estar a su lado y condenar los discursos racistas y xenófobos que pudieran surgir a raíz del atentado.
Demandamos a todas las instituciones, partidos políticos, a la sociedad civil y a la ciudadanía en su conjunto unidad y firmeza tanto en la denuncia de las causas de este terror injustificado, como en la defensa de una respuesta que priorice la defensa de los derechos humanos, la paz y la solidaridad. No podemos, ni debemos, olvidar que la violencia nace de los conflictos armados -36 abiertos en la actualidad-, del comercio de armas –y España es potencia exportadora-, del incremento de las desigualdades y la miseria, y de las violaciones de derechos humanos. Hacemos un firme llamado a evitar que el miedo se convierta en una herramienta para fomentar el odio y el racismo, o una excusa para recortar derechos y libertades.
La ciudadanía del Estado español ha salido siempre a la calle para decir no a la guerra, rechazar la violencia y mostrarse abierta como tierra de acogida. Hoy, más que nunca, exigimos la llegada de personas refugiadas y migrantes como respuesta digna y universal al sinsentido terrorista. Son precisamente esas personas quienes sufren en mayor porcentaje los ataques terroristas (solo en lo que va del mes de agosto, se han producido atentados en Somalia, Kenia, Iraq, Nigeria, Afganistán, Filipinas, Siria, Camerún, Yemen, Burkina Faso, Malí, Pakistán y Barcelona). Rechazamos la violencia y la barbarie en cualquier lugar del mundo.
El mundo se solidariza con Barcelona y nosotros y nosotras debemos responder con generosidad. Construir y defender la justicia global, fomentar la cultura de paz y la solidaridad internacional es la única salida posible. No dejemos que el terror nos gane. Por todo ello, nos sumamos a las distintas concentraciones y muestras de repulsa y solidaridad que se realizarán a lo largo del día de hoy en todo el Estado español.
Amb Barcelona y con todos los lugares del mundo que sufren atentados.