La Federación Aragonesa de Solidaridad FAS, confía en que los partidos del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Zaragoza, Partido Popular y Ciudadanos, retomarán las riendas del presupuesto municipal y modificarán su proyecto de presupuestos para recuperar los niveles de solidaridad internacional previos a los recortes que han ido realizando desde el año 2020.
Les pedimos que sean coherentes con los compromisos adquiridos:
- Coherentes con el compromiso de la ciudad de Zaragoza, a través del Pacto por la Cooperación al Desarrollo en el marco de los ODS, aprobado por unanimidad en Declaración Institucional del Pleno Municipal en 29 de septiembre de 2017, y que luego ambos partidos ratificaron con su firma en 2018. Un Pacto por el que debían destinar a cooperación no menos del 0,7% del presupuesto en 2021.
- Coherentes con los trabajos estatales para afianzar y mejorar el sistema de la cooperación al desarrollo. El miércoles de la semana pasada se aprobaba en el Senado por una amplísima mayoría la nueva Ley de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global. Ambos partidos ratificaron en el Senado esta norma que consolida el papel de las administraciones locales en el sistema de cooperación al desarrollo español y las hace partícipes de alcanzar el objetivo de destinar el 0,7 % a la Ayuda Oficial al Desarrollo en el año 2030.
Por todo ello, la FAS en representación de la sociedad civil organizada y las 53 ONG que la conforman, ha presentado una reclamación al proyecto de presupuesto municipal para el año 2023 en la que ha solicitado que se incrementen los fondos dedicados a cooperación internacional en el presupuesto 2023 del Ayuntamiento de Zaragoza. En concreto reclamamos que se aumenten las partidas de subvenciones y proyectos recortadas desde 2019 y que se recuperen los convenios nominativos del área eliminados en 2021 y 2022. Con esta propuesta se alcanzaría el 0,4%, como base para volver a caminar hacia el compromiso del 0.7% previsto en el Pacto por la Cooperación al desarrollo.
Confiamos en que el actual equipo de gobierno la asuma desde el orgullo de ciudad solidaria y que restituya la política de cooperación al desarrollo municipal al lugar que le corresponde por trayectoria, posición y respuesta ciudadana.
